Estamos acostumbrados a considerar el Amor como un sentimiento involuntario que tal y como viene, se va sin que podamos hacer nada para remediarlo, de hecho, no es difícil encontrar parejas que comentan «nos amábamos mucho, pero se nos acabó el amor», lo que conlleva en no pocos casos, a el fin de la relación. Y es que el Amor es un proceso complejo. Para poder responder a la pregunta ¿Qué es el amor verdadero? Vamos a explicar las diferentes fases del Amor: Atracción, Enamoramiento y Amor Maduro. 

La Atracción 

Es la fase física, nos sentimos atraídos por una persona que concuerda con nuestro prototipo externo (me gustan las personas rubias o morenas, altas o bajas, con los ojos de tal o aquel color, pelo liso o rizado, delgadas o más rellenitas, etc). Captamos por los sentidos una persona cuyas características físicas concuerdan en todo o en parte con nuestro ideal y el cerebro reacciona y empieza a generar cortisol, la corteza prefrontal (que es la encargada del razonamiento y el juicio), disminuye su actividad, todo junto es lo que llamamos «las mariposas en el estómago «. 

El Enamoramiento

Es la fase más emocional, puede ir seguido de la primera fase o puede incluso provocar la misma. «No me había fijado nunca en él, pero ahora que lo conozco, me parece muy atractivo». Y es que cuando nos enamoramos, nuestro cerebro segrega dopamina y endorfinas que son neurotransmisores que nos generan sensación de bienestar y felicidad.  Podemos decir que nos enamoramos de una «versión en positivo» de nuestra pareja ya que cuando tenemos esa emoción hacemos todo lo que esté en nuestra mano para agradar a la persona enamorada. En esta etapa, idealizamos a nuestra pareja. Ignoramos sus defectos y nos sumergimos en la euforia de la conexión.

Pasado un tiempo, más o menos largo, nuestro cerebro deja de segregar dichos neurotransmisores (endorfina y dopamina) de forma espontánea y dejamos de sentir dicho sentimiento de bienestar al estar junto a esa persona y es cuando la mayoría dejan de hacer aquellas cosas que aunque a nosotros no nos gustaban, las hacíamos fruto de ese «dopaje» que nos ofrecía nuestro cerebro. Es aquí donde normalmente se dice «se acabó el amor”, pero es precisamente en ese punto donde se encuentra el verdadero Amor, el Amor maduro.

Amor Maduro

Este Amor ya no es un sentimiento de por sí, es un acto de la voluntad. Si en el enamoramiento hacíamos cosas porque teníamos un sentimiento provocado por esa segregación de hormonas, el amor duradero no se basa en la pasión desenfrenada, sino en la comprensión, la compasión y la aceptación. Aquí hay algunas claves para cultivar un amor que trascienda el enamoramiento inicial:

• Conexión Emocional: El amor duradero se nutre de una conexión profunda. Compartir tus pensamientos, sueños y miedos crea un vínculo que va más allá de lo físico. Ama a tu pareja como ella lo necesita, para eso implementa en tu rutina de pareja hechos concretos utilizando los 5 lenguajes del Amor de Chapman: Palabras de Afirmación, Tiempo y Atención, Detalles, Actos de Servicio y Toques cariñosos

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• Comunicación Auténtica: Hablar sobre tus necesidades, deseos y preocupaciones es esencial. La comunicación abierta y honesta fortalece los lazos y ayuda a resolver conflictos. Lee nuestro artículo como tener una buena comunicación en el matrimonio.
• Respeto Mutuo: El respeto es la base de cualquier relación duradera. Aprecia las diferencias y trata a tu pareja con consideración y cortesía. Una buena interacción es uno de los pilares para construir un Amor duradero. Aprovecha toda interacción con tu cónyuge para acercarte emocionalmente.
• Aceptación de Imperfecciones: Nadie es perfecto. Amar a alguien significa aceptar sus defectos y peculiaridades. El amor duradero ve la belleza en la vulnerabilidad. Siempre es bueno en el matrimonio o en la pareja, realizar los cambios que estén en nuestra mano para que la vida común vaya mejor, pero hay veces que una determinada actitud o creencia no es posible de cambiar, están arraigadas ya dentro de la personalidad , es ahí donde amar significa comprender y aceptar
• Apoyo Incondicional: Estar ahí en los momentos difíciles, celebrar los triunfos y apoyarse mutuamente es crucial. El amor duradero es un equipo.
• Resolución de Conflictos: Aunque pueda parecer así, la existencia de conflictos en la pareja, no es la causa de la separación de la misma, sino más bien el no saber resolver dichos conflictos. Es normal estar en desacuerdo, muchos de los desacuerdos son resolubles pero otros muchos, no lo son, por lo que requieren de negociación y aceptación.

La pasión inicial puede haber sido como un fuego ardiente, pero el amor duradero es como el sol que es fuente inagotable de calor. Para concluir, recordemos que el amor verdadero no es solo un destino, sino un viaje eterno. Y mientras caminamos juntos, tomados de la mano, sabemos que el amor verdadero es más que suficiente para llenar todos los días con significado y belleza. Te acompañamos en ese espectacular viaje del amor en tu matrimonio.