Introducción a la Gestión de Desacuerdos en la Terapia de Pareja

En el mundo de la terapia de pareja, la gestión de desacuerdos es un área vital para abordar los problemas matrimoniales y los conflictos que pueden surgir en la relación. La existencia de los desacuerdos en una pareja no es en sí mismo un problema, el no saber resolverlos de una forma efectiva y respetuosa, sí lo es. Los conflictos en la pareja no son el dilema sino, normalmente, el síntoma de que la relación ya tiene problemas. La obra del renombrado psicólogo John Gottman ha proporcionado valiosas perspectivas y estrategias para ayudar a las parejas a superar los desafíos en su vida juntos.

Comprender los Conflictos Matrimoniales desde la Perspectiva de Gottman

Gottman es conocido por su enfoque científico en el estudio de las relaciones de pareja. Según sus investigaciones, los desacuerdos no son necesariamente un signo de una relación fallida, sino más bien una oportunidad para fortalecer la conexión emocional y la comprensión mutua. La forma en que las parejas gestionan estos desacuerdos puede marcar la diferencia entre una relación saludable y una en crisis.

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Estrategias para Abordar los Problemas Matrimoniales

1. Inicio Suave: Busca un momento tranquilo para iniciar el desacuerdo, normalmente acaban mal la mayoría de los desacuerdos que se inician de una forma brusca, alterado y en un momento inoportuno. En lugar de atacar a la pareja, Gottman enfatiza la importancia de abordar los problemas específicos de manera constructiva. Esto implica expresar sentimientos utilizando declaraciones «yo» en lugar de culpar a la otra persona. Usa la FORMULA: “YO + SENTIMIENTO + HECHO CONCRETO QUE HA MOLESTADO + PROPUESTA DE MEJORA”. Y, por supuesto, céntrate solo en un solo problema a resolver, evita estar saltando de un problema a otro sacando la lista de faltas del pasado.
2. Comunicación respetuosa: Si eres el que habla, hazlo de forma breve y deja hablar, procura no bloquearte y acaparar la conversación. Evita ataques, insultos, sarcasmos y, por supuesto, culpar a tu cónyuge. Si eres el que escucha, hazlo activamente, sin distracciones e intenta comprender bien la queja. Reformula y haz todas las preguntas que consideres necesarias para asegurarte de que has comprendido bien el motivo por el que tu cónyuge está molesto. Reconoce los propios errores y los sentimientos heridos.
3. Mantenerse Tranquilo: Al abrumarse, todo se percibe como un ataque del que me tengo que defender, bien atacando (gritando, acusando…), huyendo (callándome, poniendo mala cara, aceptando cualquier cosa para terminar la situación tensa…) o bloqueándome (acumulo una cascada de razonamientos alterados sin parar para defender mi postura y acuso al otro sin ser capaz de responder ni razonar). Tranquilizarse y tranquilizar a mi pareja en un desacuerdo es equivalente a saber quitar el pie del acelerador y usar el freno cuando se está conduciendo un coche. Sin bajar la velocidad y frenar, habrá seguramente un accidente; igualmente, sin tranquilizarnos y tranquilizar a nuestro cónyuge, se termina haciendo daño.

Quitahierros

Para tranquilizarnos podemos usar una herramienta que llamamos los “Quitahierros” que son acciones cuyo objetivo es mitigar la tensión en vez de escalarla, como por ejemplo:

• La aceptación y el ofrecimiento de disculpas: “cierto que no hice la tarea que me había comprometido, lo siento, intentaré que no vuelva a ocurrir”
• Reconocer lo bueno del otro: “Es verdad que tú haces muchísimo en la casa y todos te estamos agradecidos”
• Ofrecimiento para calmarse: “¿Te traigo algo de beber y nos da un tiempo para calmarnos y seguir?”
• Humor: siempre que sea aceptado por los dos y hablado previamente.
• Expresiones de cariño: “Eres el amor de mi vida y me duele haberte hecho daño, me encanta verte feliz, intentaré mejorar”
• Descanso para relajarse: También acordado previamente, tomarse un descanso, dar un paseo, refrescarse la cara con agua, beber algo, escuchar música en soledad, lo que se necesite para bajar la tensión y luego volver e intentar de nuevo resolver el problema.

4. Pasar de los “Que” a los “Para Que”: Es muy difícil llegar a un acuerdo cuando se coloca el diálogo en elegir entre lo que quiere mi cónyuge o nada. Se convierte en una lucha de poder y rápidamente, la conversación se sale del tema del que se hablaba para atacar al otro que es desconsiderado y dominante. Hay que conocer también para qué quiere hacerlo, los objetivos, las ilusiones, los miedos que empujan a uno a preferir algo por encima de la comunión con el otro. Empezar por conocer los objetivos que la otra persona desea alcanzar con su posición, y los males que intenta combatir, es fundamental para honrar a mi cónyuge y tener una postura que ganemos todos (WIN/WIN).

La Regla del 5 a 1

la Regla del 5 a 1 de Gottman es una de las herramientas más destacadas en su enfoque para entender y mejorar las relaciones de pareja. Esta regla se basa en su investigación exhaustiva sobre el comportamiento de las parejas durante los conflictos y cómo este impacta en la estabilidad de la relación a largo plazo.

En esencia, la Regla del 5 a 1 postula que para cada interacción negativa durante un conflicto o desacuerdo, las parejas necesitan tener al menos cinco interacciones positivas para mantener un equilibrio emocional y una conexión saludable en la relación. Esto implica que las interacciones positivas tienen un peso mucho mayor que las negativas en la calidad de la relación.

Las interacciones positivas pueden variar desde gestos simples de afecto y apoyo, hasta expresiones de gratitud, admiración y reconocimiento. Estas acciones positivas ayudan a contrarrestar el impacto emocional de los desacuerdos y a fortalecer el vínculo entre las parejas.

Por ejemplo, una pareja puede tener una discusión sobre las finanzas familiares, que puede generar tensiones y emociones negativas. Sin embargo, si después de esa discusión ambos miembros de la pareja se toman el tiempo para expresar gratitud por el esfuerzo que hacen el uno por el otro, para compartir un momento de risas juntos o para brindarse apoyo emocional en otros aspectos de la vida, estas interacciones positivas ayudarán a restablecer el equilibrio emocional en la relación.

La Regla del 5 a 1 no implica que las parejas deban evitar por completo los conflictos o desacuerdos, sino que enfatiza la importancia de cultivar un clima de positividad y apoyo mutuo en la relación. Al poner en práctica esta regla, las parejas pueden fortalecer su conexión emocional y construir una base sólida para superar los desafíos que enfrenten juntos.

La Importancia de la Terapia de Pareja en la Gestión de Desacuerdos

La terapia de pareja proporciona un entorno seguro y guiado por un profesional para abordar los problemas matrimoniales y conflictos. Un terapeuta capacitado en las teorías de Gottman puede ayudar a las parejas a implementar estrategias efectivas de gestión de desacuerdos y a fortalecer su relación a largo plazo.

Conclusiones

En conclusión, la gestión de desacuerdos en la pareja es crucial para mantener una relación saludable y duradera. Siguiendo las enseñanzas de Gottman y buscando ayuda profesional cuando sea necesario, las parejas pueden aprender a abordar los problemas matrimoniales de manera constructiva y fortalecer su vínculo emocional a lo largo del tiempo.